martes, 14 de enero de 2014

El claretiano Mons. Fernando Sebastian, nuevo cardenal de la Iglesia Católica


El domingo 12 de enero de 2014, al finalizar el Ángelus en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco ha anunciado la convocatoria del concistorio del colegio cardenalicio que se tendrá el día 22 de febrero, fiesta de la Cátedra de San Pedro en la que serán creados 16 nuevos cardenales electores y tres no electores.
Entre los "no electores" designados se encuentra el Misionero Claretiano, Mons. Fernando Sebastián Aguilar CMF, Arzobispo emérito de Pamplona. 
El movimiento de Seglares Claretianos se Suma a las felicitaciones que está recibiendo Mons. Fernando Sebastián por el nombramiento como cardenal de nuestra querida Iglesia. Nos sentimos llenos de alegría, gratitud y orgullo de familia y esperamos que esta sea una oportunidad para multiplicar la difusión de su pensamiento sobre la evangelización, que tanto bien y luz nos aporta a todos. 

MONSEÑOR FERNANDO SEBASTIÁN nació en Calatayud (Zaragoza), el 14 de Diciembre de 1929. Después de haber realizado sus Estudios Primarios y Bachillerato en su localidad natal, ingresó en la Congregación de Misioneros Claretianos en Vich, donde hizo su profesión religiosa el 8 de Septiembre de 1946. 
Curso sus estudios de Filosofía y Teología en los Seminarios de Solsona y Valls, donde fue ordenado sacerdote el 28 de Junio de 1953. Más tarde se doctoró en Teología en Roma defendiendo su tesis sobre la Maternidad Divina de María. Y amplía sus estudios en 1956 en la Universidad de Lovaina (Bélgica). Se dedica a la docencia de Teología en los Seminarios Claretianos de Valls, Salamanca y Roma, y a partir de 1967 en la Universidad Pontificia de Salamanca, donde fue nombrado Rector en 1971. Su tarea en el estudio y la enseñanza fue siempre una forma de revisar y enriquecer la vida de la Iglesia. 
Dirigió desde 1966 a 1971 la revista “Iglesia Viva” y “Ephemerides Mariológicas”. Son abundantes sus escritos, principalmente sobre mariología, pastoral de los Sacramentos, relación fe y cultura, fe y política y el descubrimiento de Dios. En agosto de 1979 es nombrado obispo de León, y es consagrado obispo el 29 de Septiembre de 1979. 
En 1982 es elegido Secretario General de la Conferencia Episcopal Española, y ante la incompatibilidad para llevar ambas misiones, renuncia a la sede de León en junio de 1983. En 1988 tiene que renunciar a ese cargo, pues la Santa Sede le nombra Arzobispo Coadjutor de Granada, donde llega el 5 de Junio de 1988. 
En 1990 es elegido como Gran Canciller de la Universidad Pontificia de Salamanca, a lo que tiene que renunciar poco después, pues el 3 de Julio de 1991 es nombrado Arzobispo-Administrador Apostólico de la Diócesis de Málaga, en el que tomó posesión el 15 de Septiembre de 1991. 
El 26 de Marzo de 1993, fue nombrado por la Santa Sede Arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela. Es obispo de las diócesis navarras hasta el 31 de julio de 2007, al conocerse el nombramiento de su sucesor Mons. Pérez González, que toma posesión el 30 de septiembre de ese año. 
Mons. Sebastián tiene su residencia a Málaga donde viene prestando un inestimable servicio para servir a esta Diócesis. Entre otras actividades destaca su labor docente, impartiendo clases en el Seminario Diocesano y en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas "San Pablo". Su nombramiento no le ha hecho plantearse el cambio de residencia. 
Su vivienda en Málaga, en la Casa Diocesana de Espiritualidad, consiste en un pequeño espacio que consta de una habitación a modo de despacho y sala de estar, un dormitorio y un baño. El equipo de trabajo de la Casa Diocesana, con quien convive a diario, expresa el afecto que Mons. Sebastián inspira en la gente que lo rodea, y destaca de él su carácter humilde, autosuficiente y agradecido a cualquier servicio que se le preste. 
Monseñor Fernando Sebastián ha escrito numerosos libros con temas tan actuales para nuestro carisma como la fe, la familia, o la evangelización. 

La responsable de Comunicación del Movimiento de SSCC, Vito Flores, pudo estar con él en la rueda de prensa que ofreció en Málaga y nos envió con ella "un saludo afectuoso a todos sus hermanos de la Familia Claretiana". Reproducimos a continuación parte de las declaraciones de la rueda de Prensa:

Mons. Sebastián: «Estoy muy contento y agradecido y así se lo he comunicado al papa Francisco»

 

«El nombramiento me llena de satisfacción y a la vez, tengo que confesar, me avergüenza un poco. Porque yo estoy seguro de que hay otros muchos que han hecho tantos o más servicios que yo a la Iglesia», ha asegurado Mons. Sebastián en la rueda de prensa que ha tenido lugar en el Obispado de Málaga. 
Durante media hora, Mons. Sebastián ha respondido a las preguntas de los periodistas y ha manifestado su agradecimiento al papa Francisco por el nombramiento que le convertirá en cardenal de la Iglesia el próximo 22 de febrero: «lo valoro mucho. Tengo 84 años y a esta hora no esperaba nada de nadie, en cambio el Papa ha tenido este gesto de amabilidad y de reconocimiento». 
Ha contado Mons. Sebastián cómo conoció el anuncio de su nombramiento de forma inesperada, cuando participaba ayer en la Fiesta del Bautismo del Señor en la Catedral de Málaga. «Subí a casa y tenía un montón de llamadas en el teléfono y de e-mails de todos los medios posibles. Ayer estuve, salvo la media hora de comer, todo el rato contestando llamadas, hasta la una de la mañana, de personas de todas partes que me felicitaban y me mostraban la alegría por mi nombramiento». 
El arzobispo emérito de Pamplona y Tudela, que reside en Málaga desde el año 2007, ha confesado que no esperaba su nombramiento como cardenal. También ha relatado cómo ha escrito una carta al papa Francisco expresándole su gratitud: «El servir a la iglesia en servicios importantes como yo he tenido la oportunidad de hacer es un premio para uno mismo. Yo estoy muy contento y muy orgulloso de haber podido hacer lo que hecho; y sólo lamento no haber hecho más y mejor. Entonces, con esa especie de fondo, de sombra, yo estoy muy contento, muy agradecido y así se lo he manifestado al Santo Padre en una carta que le he escrito esta madrugada, cuando me he despertado». 
Sobre las nuevas tareas que le esperan como cardenal, Mons. Sebastián expresa: «los cardenales son, generalmente, colaboradores personales del Papa y consejeros del Papa en los temas más delicados y más importantes de la Iglesia. Supongo que algo de todo esto tendremos que hacer». El arzobispo también ha dicho que mantiene una relación cordial con el papa Francisco y ha recordado que le conoce desde el año 1996: «el Papa, siendo cardenal arzobispo de Buenos Aires, vino a dirigir los ejercicios espirituales a los obispos españoles, a los cuales yo asistí, y tuve interés de ir a saludarle. Entonces yo era comisario pontificio de Lumen Dei, que tenía varias comunidades en Buenos Aires y yo quería hablar de ello con el cardenal Bergoglio. Mi sorpresa fue cuando yo voy a su despacho y me dice: "Hombre, Monseñor Fernando Sebastián. Soy discípulo suyo, si yo he leído todo lo que usted ha publicado”. Yo le dije que me sentía muy honrado, que me alegraba mucho. Eso ya creó una cierta cercanía entre nosotros. Luego, cuando le hicieron Papa, le escribí, le felicité y tuve oportunidad de ir con D. Jesús Catalá en peregrinación diocesana. Le dejé mi libro sobre la fe y otra vez que fui a Roma también tuve ocasión de hablar con él. Le tengo una gran estima y una gran admiración porque realmente es un hombre de muchísimos valores». 
Por último, Mons. Sebastián ha aseverado: «yo nunca he esperado ser cardenal, ni lo he deseado, incluso ahora me cuesta un poquito de sacrificio el meterme en esta danza. Y en la Iglesia trabajamos siempre a fondo perdido. Es decir, yo nunca he tenido sensación de que con mi trabajo en la Iglesia merecía ningún reconocimiento. Yo he trabajado por mis convicciones y porque creo que Jesús es verdaderamente lo mejor para la Humanidad. Y porque me parecía importante el poder colaborar con la Iglesia en el anuncio de Jesús para el bien de mis hermanos».